La Selección Natural
La lógica de la selección natural no brinda razones que hagan pensar que el cambio evolutivo se limita al pasado. Al fin y al cabo, la variación hereditaria y la competencia por el acceso a los recursos sin duda no se limitan a pasado. Si Darwin y Wallace tuvieron razón en cuanto a que esas condiciones llevan inevitablemente a la evolución por selección natural, entonces los observadores y experimentadores científicos tendrían que ser capaces de detectar el cambio evolutivo mientras éste ocurre, y lo han hecho.
Teoría del individuo con capacidad de sobrevivir:
La lógica sugiere que la consecuencia resultante debe ser el cambio a lo largo del tiempo de las características de las poblaciones. En "El origen de las especies", de Charles Darwin propuso el siguiente ejemplo: "Tomemos el caso de un lobo, que se alimenta de diversos animales y los atrapa mediante la velocidad......Los lobos más veloces y esbeltos tendrían las mejores probabilidades de sobrevivir, y de esta forma de conservarse mejor o ser seleccionados....Ahora bien, si en un leve cambio innato de hábito o estructura beneficiara a un lobo individual, éste tendría la mayor probabilidad de sobrevivir y dejar descendientes. Algunas de sus crías probablemente heredarían las misma características o estructuras y, mediante la repetición de este proceso, se podría formar una nueva variedad".
En conclusión la selección natural actúa sobre los individuos dentro de una población. Es mismo argumento sería aplicable a sus presas; las más veloces y astutas tendrían la posibilidad de sobrevivir y así recrear.
Un individuo no evoluciona, una población en cambio, sí. Aunque resulta más fácil comprender como la selección natural generaría cambios dentro de una misma especie, en circunstancias adecuadas al proceso puede producir especies completamente nuevas. Adaptándose a su entorno obviamente.
Las Estructuras Homólogas:
Una estructura corporal puede modificarse mediante evolución para cumplir diferentes funciones distintas especies. Mediante la Selección Natural, las extremidades anteriores ancestrales experimentaron diferentes modificaciones en distintos tipos de animales. Parece inconcebible pensar que una misma posición de huesos sirva para desempeñar funciones tan diversas, su cada animal se hubiera creado por separado.
Estructuras Vestigiales:
La evolución por selección natural también ayuda a explicar la curiosa circunstancia de estructuras vestigiales que, al parecer carecen de propósito definido. El hecho de que sigan existiendo en animales que no las usan se explica mejor como una especie de "equipaje evolutivo". En conclusión no tienen ningún propósito en las anatomías de ciertas especies.
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